lunes, 10 de mayo de 2010

Capítulo 85: La capital de los zares.

Sin tener tiempo ni para respirar, el día 1 de abril nos vamos a San Petersburgo, estuvimos bastante tiempo preparando el viaje con el tema de seguro, invitación, visado... pero al final allá nos vamos Aga, Gema y yo, en Rusia nos encontraremos con Nahikari, Silvia y 7 amigos de Nahika que viajan desde Gasteiz. Éramos 12 en total pero lo pasamos bien, hubo muy buen rollo a pesar de que muchos no nos conocíamos.

No sé mucho que decir de la ciudad, es gigante, todo, las avenidas, las iglesias, los palacios, ¡todo!. Está sucia de polvo y aún hay una poca nieve, pero es muy bonita, mucho. Los zares rusos se nota que vivían fuera de la realidad (y así terminaron como terminaron), mientras el pueblo se moría de hambre ellos lo hacían todo en plan megalómano. Palacios increíbles, lujos exagerados, desprecio por los súbditos. La cuidad fue creada para ser capital del imperio, así que no se escatimó en nada, ni siquiera en vidas humanas. Se fundó en unas marismas así que los obreros, básicamente esclavos suecos y campesinos, recogían el fango para colocar los cimientos con las manos, morían por miles y sus huesos están en los cimientos. Como cosa buena, nos han dejado para la posteridad un sitio increíble, de gran belleza pero exagerado hasta no poder más.

Los rusos son muy amables, no hemos tenido problemas de ningún tipo. Estábamos en un hostel que por fuera daba miedo pero por dentro estaba bastante bien. y no era caro. Comimos a veces barato y otras más caro, pero no era demasiado, la bebida un poco cara pero sin pasarse. Eso si, para cualquier cosa que visites pagas unos 10€, y ente museos e iglesias te dejas un dineral. El museo del Hermitage es alucinante, en pintura clásica es muy bueno, con muchos cuadros y muy variados, de las principales escuelas europeas.

Para los curiosos, las rusas son eslavas, pero muy eslavas, muy guapas (si no estás acostumbrado a este tipo de mujeres todas te parecen modelos) y estilosas, pero al igual que las eslovacas (y len general las eslavas que he visto) se pasan con el tema de la ropa y el taconeo, llevan unos tacones exagerados, una ropa muy llamativa y la cara con una capa de maquillaje que ya quisieran para si The Kiss, y lo peor es que casi no ves variedad, da la impresión de que las que pueden se arreglan a tope y las que no van como pueden. incluso en las tiendas la ropa es así, y para los tíos peor, no se encuentra nada.

Otro detalle curioso es que es el sitio donde más limusinas he visto, en 6 días de viaje por lo memos vimos unas 1o, incluso una limusina hummer, para flipar.

Resumiendo, sitio increíble y muy recomendable, creo que debo volver porque es tan grande y hay tantas cosas para ver que en una semana apenas da tiempo a nada.