jueves, 28 de enero de 2010

Capítulo 82: El otoño y la navidad.





De arriba hacia abajo. En la 1ª, navegando en tierra firme. En la 2ª con los novios. En la 3ª con el pequeño Tomás e Iago, Roi no aparece porque está a su bola. En la 4ª antes de entrar en la stuzková. En la 5ª el robo de iberia.

Después del viaje a Berlín poco que contar hasta la navidad. Aga viene casi todos los fines de semana, la idea es que yo estudie un poco para las opos pero nada, soy un vago redomado. El sábado 14 de noviembre vamos a la fiesta de graduación de 5ºE, esta vez viene Aga, así que vamos todos los profes y de acompañantes Aga y Emilio, el novio de Tamara. Lo pasamos muy bien.

Otra fiesta importante fue la celebración del 10º aniversario de nuestro instituto. Para tan magno acontecimiento se preparó un programa con música, baile y la representación de tres obras de teatro, la del grupo de francés, la del grupo de español y otra en eslovaco. Recibimos la visita de los embajadores belga y español, así como varias personalidades regionales y locales, así como varios profesores que estaban antes. La fiesta estuvo bien, sirvió para comprobar una vez más el enorme talento de nuestro estudiantes que lo hicieron todo.

En estas fechas también estamos los profes españoles en Eslovaquia en pie de guerra, hasta le 4 de diciembre no nos pagan las ayudas de este curso, 4 meses y la mitad del viaje. Algún día dedicaré una entrada al funcionamiento de al agregaduría y del ministerio, vais a flipar. La verdad, si nuestros jefes del programa funcionan así y se extrapola al funcionamiento del ministerio, se entiende que la educación en nuestro país no funcione, no puede.

Diciembre pasa rápido y llega la esperada navidad, en los días previos aparece algo de nieve por Zilina. Viajo con muchas ganas porque voy a conocer a la nueva estrella de la familia, a mi nuevo sobrino Tomás, hijo de mi hermana pequeña Susi y su novio Diego. El niño, como no podía ser menos, es muy bonito, y a decir de opiniones objetivas como la de sus padres, es listo a más no poder; si tan agudos observadores lo dicen no seré yo quien lo dude. En la navidad tenemos un tiempo terrible, los primeros días no, pero después lluvia y lluvia y lluvia. Paso los días en casa, viendo a algunos amigos y poco más. El domingo 27 de diciembre me fui a la boda de Tamara y Emilio, dos compañeros que trabajan en Eslovaquia y que se conocieron allí, ¡que lo que Eslovaquia ha unido que no lo separe el hombre!

Al regreso y con el tema de siempre, los retrasos, en Madrid casi pierdo el enlace a Viena, así que llago yo pero no mi mochila, que tarda una semana más. A parte de perderme la maleta, confirmar que los de iberia son unos ladrones con todas las letras, por un bocata y una lata de coca cola me cobraron ¡10€!; si esto no es robar ya me diréis.

lunes, 11 de enero de 2010

Capítulo 81: El viaje a Dresden y Berlín.





De arriba hacia abajo. En la 1ª una vista de Dresden. En la 2ª en la puerta de Brandenburgo, en Berlín. En la 3ª en el muro de Berlín. En la 4ª una moto clásica y en la 5ª una cosa curiosa, la moto tiene llave pero no la roban, imaginaos que pasaría en España.

El jueves 29 y el viernes 30 de octubre tenemos libre, así que nos vamos de viaje a Dresden y a Berlín. Vamos en el coche Aga y yo y en Dresden nos unimos a otros profes con los que hacemos el viaje.

Dresden es una ciudad grande y en el casco antiguo se nota mucho el destrozo provocado por los bombardeos aliados en la segunda guerra mundial, sobre todo en una famosa iglesia que se reconstruyó a partir de las ruinas que quedaron.

En Berlín nos quedamos en casa de Eva, la amiga sueca de Aga y también nos encontramos un día con una amiga del pueblo de Aga que estudia allí. Berlín es una gran capital y un sitio muy curioso. Hay mucho movimiento de gente, mucha cultura y todo eso, muy cosmopolita. Ciudad enorme con grandes plazas, avenidas y edificios, palacios, parques gigantes en el centro de la cuidad, y todas esas cosas de las ciudades neoclásicas. En esto me recuerda un poco a otras ciudades, que son distintas, pero que tienen un aire parecido, me refiero a Viena y Budapest, que tienen ese rollo gigante y megalómano con el que fueron construidas.

Pero lo más espectacular es el tema del muro y de la división de la cuidad. El muro, del que permanecen algunas partes en recuerdo de lo que nunca debió ocurrir, separa la cuidad en dos zonas claramente diferentes, la del oeste mucho más moderna y la del este, con sus bloques comunistas y que está mucho más destartalada a pesar del dinero invertido en su recuperación. Decir que salimos un poco de fiesta y es bastante barato, hemos tomado cerveza en algún pub por unos 2€. Y comer tampoco es caro. No hemos visto demasiado porque estuvimos poco tiempo, pero opciones hay para dar y tomar, solo en museos te puedes tirar unos días. Quedará para otra ocasión, esta vez no dio para más.

Capítulo 80: La ruta infernal y la avería.





De arriba hacia abajo. En la 1ª espectacular vista en la montañas cerca de Zakopane. En la 2ª algunos de los que fuimos a la ruta. En la 3ª mi coche en la grúa antes de partir hacia Zilina. En la 4ª una vista del Danuvio desde el castillo de Devin, al fondo está Austria. En la 5ª soplando las velas en mi fiesta de cumpleaños.

El fin de semana del 25 al 27 de septiembre de 2009 voy a Bratislava, el sábado 26 vamos al castillo de Devin que está cerca de Bratislava, es muy bonita la zona. El siguiente, del 2 al 4 de octubre, Aga viene a Zilina y el sábado nos vamos a hacer una ruta en la montaña con Gema, Gabika y Fedo, nuestros anfitriones en las rutas que hacemos. Vamos a un sitio a unos 20 km y es alucinante, vamos por un bosque encantado, un lujo.

El fin de semana del 9 al 11 de octubre nos vamos a Zakopane otra vez, hemos quedado un grupo de gente para visitar la ciudad y hacer una ruta en la montaña. Lo pasamos muy bien, el viernes de cena (yo tomo golonko, codillo) y el sábado subimos para hacer la ruta. El camino es muy bonito, pero tenemos un problema, hace mal tiempo, subiendo fue bien, incluso paramos a tomar una sopa en un resturante que hay arriba, pero la bajada fue infernal, llovía a cántaros y nos mojamos hasta los calzoncillos, pero a pesar de eso fue muy bueno, el sitio es espectacular. El domingo nos fuimos de compras, que en Zakopane se compran cosas de montaña a buen precio. Después de comer tocaba regresar, pero yo tuve un problema, se me quemó un tubo del motor y la dirección asistida no funcionaba, así que llamamos al seguro (mutua madrileña) y me enviaron una grúa que nos llevó a casa.

Para arreglarlo quería ir al taller oficial, pero me pedían 200€ por el tubo y ponerlo, así que pasé; Gabika tiene un amigo mecánico y me consiguió la pieza original, con la instalación me cobró 110€, así que me ahorré 90 eurazos, no está mal.

Este mes es de bastante trabajo porque los fines de semana Emilio y yo tenemos que terminar una publicación que estamos haciendo, es un peñazo, tenemos que corregir, formatear, poner dibujos..., todo sea por los puntos para las oposiciones. El sábado 23 de octubre me hacen una fiesta sorpresa en casa de Tamara, con la complicidad de Aga me están esperando para cenar y pasar la velada juntos, no lo esperaba así que me quedé un poco de piedra al llegar allí.