De arriba hacia abajo. En la 1ª, navegando en tierra firme. En la 2ª con los novios. En la 3ª con el pequeño Tomás e Iago, Roi no aparece porque está a su bola. En la 4ª antes de entrar en la stuzková. En la 5ª el robo de iberia.
Después del viaje a Berlín poco que contar hasta la navidad. Aga viene casi todos los fines de semana, la idea es que yo estudie un poco para las opos pero nada, soy un vago redomado. El sábado 14 de noviembre vamos a la fiesta de graduación de 5ºE, esta vez viene Aga, así que vamos todos los profes y de acompañantes Aga y Emilio, el novio de Tamara. Lo pasamos muy bien.
Otra fiesta importante fue la celebración del 10º aniversario de nuestro instituto. Para tan magno acontecimiento se preparó un programa con música, baile y la representación de tres obras de teatro, la del grupo de francés, la del grupo de español y otra en eslovaco. Recibimos la visita de los embajadores belga y español, así como varias personalidades regionales y locales, así como varios profesores que estaban antes. La fiesta estuvo bien, sirvió para comprobar una vez más el enorme talento de nuestro estudiantes que lo hicieron todo.
En estas fechas también estamos los profes españoles en Eslovaquia en pie de guerra, hasta le 4 de diciembre no nos pagan las ayudas de este curso, 4 meses y la mitad del viaje. Algún día dedicaré una entrada al funcionamiento de al agregaduría y del ministerio, vais a flipar. La verdad, si nuestros jefes del programa funcionan así y se extrapola al funcionamiento del ministerio, se entiende que la educación en nuestro país no funcione, no puede.
Diciembre pasa rápido y llega la esperada navidad, en los días previos aparece algo de nieve por Zilina. Viajo con muchas ganas porque voy a conocer a la nueva estrella de la familia, a mi nuevo sobrino Tomás, hijo de mi hermana pequeña Susi y su novio Diego. El niño, como no podía ser menos, es muy bonito, y a decir de opiniones objetivas como la de sus padres, es listo a más no poder; si tan agudos observadores lo dicen no seré yo quien lo dude. En la navidad tenemos un tiempo terrible, los primeros días no, pero después lluvia y lluvia y lluvia. Paso los días en casa, viendo a algunos amigos y poco más. El domingo 27 de diciembre me fui a la boda de Tamara y Emilio, dos compañeros que trabajan en Eslovaquia y que se conocieron allí, ¡que lo que Eslovaquia ha unido que no lo separe el hombre!
Al regreso y con el tema de siempre, los retrasos, en Madrid casi pierdo el enlace a Viena, así que llago yo pero no mi mochila, que tarda una semana más. A parte de perderme la maleta, confirmar que los de iberia son unos ladrones con todas las letras, por un bocata y una lata de coca cola me cobraron ¡10€!; si esto no es robar ya me diréis.